Ley de Equidad para los Agricultores aprobado por la legislatura de California en 2017 definió a los "agricultores y ganaderos socialmente desfavorecidos" y exigió al Departamento de Alimentación y Agricultura de California (CDFA) que garantice que las leyes, políticas y programas de alimentación y agricultura se desarrollen en consulta con agricultores y ganaderos socialmente desfavorecidos y mujeres.
El CDFA ha publicado recientemente el Informe 2020 a la Legislatura de California sobre la Ley de Equidad para los Agricultores sobre los progresos realizados hasta la fecha en la aplicación de la Ley de Equidad para los Agricultores. A partir de datos basados en entrevistas con partes interesadas y organismos, el informe identifica cuatro retos principales a los que se enfrentan los agricultores y ganaderos socialmente desfavorecidos y sugiere acciones específicas para afrontar cada reto.
Los perfiles de los agricultores se intercalan a lo largo del texto, ilustrando la diversidad de las explotaciones agrícolas de California y las complejidades a las que se enfrentan estas operaciones. Entre los agricultores con certificación CCOF perfilados en el informe se encuentran Myrna Arambula, Kaley Grimland-Mendoza y Edgar Mendoza, y Nikiko Masumoto.
El informe cita datos del Censo de Agricultura que muestran que el 19% -o casi 1 de cada 5- de los agricultores y ganaderos de California están socialmente desfavorecidos y señala que esta estadística es probablemente una subestimación del número real de productores socialmente desfavorecidos porque muchos productores no devuelven las encuestas del Censo de Agricultura.
Los cuatro retos identificados en el informe son:
Desafío 1: tenencia de la tierra. Muchos agricultores y ganaderos socialmente desfavorecidos arriendan la tierra en lugar de poseerla. La incertidumbre anual sobre la disponibilidad de tierras puede disuadir a los agricultores de invertir en prácticas de conservación y descalificarlos para programas de ayuda estatales y federales. El informe señala la tenencia de la tierra como el mayor reto para los agricultores principiantes.
El informe ofrece algunas soluciones, entre las que se incluyen la divulgación para que los agricultores conozcan los programas de préstamos y otras ayudas, la revisión de los requisitos de los programas de subvenciones para garantizar que las explotaciones agrícolas y ganaderas en tierras arrendadas puedan optar a ellas, y el trabajo para aumentar el acceso a las tierras preservadas en servidumbres agrícolas para agricultores y ganaderos principiantes y socialmente desfavorecidos.
Desafío 2: idioma. Muchos agricultores socialmente desfavorecidos no hablan inglés como lengua materna, lo que dificulta el acceso a la información sobre producción agrícola, comercialización y programas de apoyo. Pocos agricultores socialmente desfavorecidos pueden permitirse pagar los servicios de consultores de cultivos y deben confiar en la información de los proveedores públicos de asistencia técnica, como el personal del Distrito de Conservación de Recursos (RCD) y de Extensión Cooperativa de la UC (UCCE), lo que crea una gran demanda de especialistas bilingües en información.
El CDFA ha tomado medidas para traducir materiales al español e incentiva al personal a tener competencia bilingüe. En 2019, el CDFA creó un nuevo puesto dedicado específicamente a la divulgación entre agricultores y ganaderos hispanohablantes. El CDFA también tiene una cuenta de Twitter en español y traduce todos los comunicados de prensa al español. Los programas clave del CDFA, incluida la Oficina de Innovación Ambiental y CalCannabis, cuentan con personal dedicado a la divulgación pública para grupos de agricultores desatendidos. El CDFA tiene previsto añadir un botón de traducción de Google a su sitio web para que todos los materiales puedan traducirse a varios idiomas.
Reto 3: compromiso con la industria agrícola y las juntas/comisiones. El CDFA solicita la opinión de agricultores y ganaderos a través de consejos consultivos, grupos de trabajo y numerosas comisiones de productos básicos. Los productores socialmente desfavorecidos están infrarrepresentados en estos órganos: el informe señala que sólo el 10% de los miembros de las juntas y comités del CDFA son mujeres y que el 84 son blancos/caucásicos. Las razones de esta asimetría incluyen los horarios de reunión durante las horas de trabajo, las barreras lingüísticas y el hecho de no ver el valor de unirse a estos grupos.
Para hacer frente a este reto, el CDFA tiene previsto llevar a cabo actividades de divulgación entre los agricultores socialmente desfavorecidos para reclutarlos para las juntas y comisiones consultivas. El CDFA también está evaluando las comunicaciones, la logística y la composición de los consejos de cada entidad para encontrar formas de hacerlos más accesibles a los agricultores y ganaderos socialmente desfavorecidos.
Reto 4: acceso a los recursos y programas disponibles. El CDFA ofrece subvenciones directamente a los agricultores a través de los Programas de Agricultura Climáticamente Inteligente, que incluyen el Programa de Suelos Saludables, el Programa Estatal de Eficiencia y Mejora del Agua, el Programa de Gestión Alternativa del Estiércol y el Programa de Investigación de Digestores Lácteos. Los agricultores y ganaderos socialmente desfavorecidos pueden no ser conscientes de estas oportunidades de financiación a menos que se dé prioridad a sus comunidades para la divulgación y el apoyo técnico. El CDFA ha conseguido aumentar la participación en algunos programas dando prioridad a este tipo de apoyo y tiene previsto continuar esta labor.
El informe finaliza con recomendaciones para que el propio CDFA aborde la equidad entre agricultores, como proporcionar formación sobre equidad racial al personal, una representación más diversa de agricultores y ganaderos en los materiales de divulgación y coordinar los esfuerzos en materia de equidad con otras agencias estatales.